Existe una inclinación natural a simplificar los problemas enfocándonos en lo más fácil de medir.
Sin embargo, lo más fácil rara vez es lo más importante. En ocasiones, ni siquiera es relevante. Este es uno de los riesgos clave al depender exclusivamente de métricas.
Reflexión:
¿Tus métricas reflejan lo que realmente importa o solo lo que es más fácil de cuantificar?
“No todo lo que cuenta puede medirse, y no todo lo medible cuenta.”






Leave a comment